Lo he dejado todo a un lado
He dejado de mirarme
En tu frágil mirada
He dejado frotar tus pies con los míos
He dejado a un lado tu soberbia
Y mi amargura.
Porque nada ha sido decadente
Como así lo desea la gente
Nos encontramos viviendo momentos distintos
Porque ya no queda nada,
Es puro encierro...
Donde los sentimientos ruegan por salir
Mil botellas de licor a lo mejor
Liberen el despecho
Pero... ¿Quién soy yo, ahora?
Ahora que te vi de verdad,
Sin mentiras, sin caretas.
Eras tú
Una jovial mentirosa
Que alegró mis días,
Que me entrego sus manías,
Pero encontré el tesoro
Donde tú mirada no fue sincera
Siempre fue la misma
No es frágil, no lo fue nunca
pero sigo respondiendo a ella,
Como un perro faldero al que enseñaste bien.
domingo, 21 de septiembre de 2014
martes, 22 de julio de 2014
Letargo.
Absorbo lo ultimo que queda del cigarro
Corriendo van los inocentes con sus celulares escondidos en el culo,
Corriendo van los inocentes con sus celulares escondidos en el culo,
Veo
detalladamente la cara de los malandros
Las
placas de las motos…
Mis
ojos quedan en la mitad,
Entre
grillos, gritos, golpes y amenazas.
Tres
tragos seguidos de un ron rancio,
Tres
vasos de agua con azúcar,
Tres
huevos en el sartén para matar el hambre.
Las
horas pasan muy lento
Tan
lento que siento su estado puro,
Puras
y abrumadoras son las alucinaciones,
Alucinaciones
que son justificadas
Por
un maldito sistema de gobierno
Que
tiene mi cuerpo inmóvil,
Que
tiene mi cabeza loca,
Que
tiene mi voluntad destrozada.
Salto
dentro de mi casa,
Como
si fuese niño de nuevo
Haciendo
de mi cama un trampolín,
Dos
saltos y caigo al suelo
Rebota
tan fuerte mi cabeza que se agrieta.
La
sangre escandalosa hace su mejor jugada
Pero
me toco y no es nada.
Coloco
las sabanas de mi último polvo
Aromas
desagradables se mezclan con el olor a hierro de la sangre.
No
tengo ánimos de sentirme limpio esta noche.
Vueltas
en círculos mirando el suelo,
Vueltas
en círculos, mirando al techo,
Vueltas
en círculos mirando al gato y al perro
Que
yacen dormidos en el rincón…
El
mareo se hace antagonista
Y
llega el vómito a ser una estrella,
Son las 3:77 a.m. o las 2:69 a.m.
No
sé en qué parte del tiempo ando
Ya
perdí el rastro del reloj.
Quemando
las fotografías
Donde
mi perfil no favorece
Con mi
sonrisa, mi hipócrita sonrisa.
Mis
ojos están hechos de titanio
Titanio
fuerte que pesa y resiste todas mis capacidades…
El
humo me asfixia,
Me
tropiezo con todo
Teniendo mis pies descalzos
Siento
que tengo los pies en la tierra,
Como
cuando veía todo más hermoso
Como
cuando todo está bien
Antes
de que llegaras a joder.
Despecho,
aburrimiento y monotonía
Mi
cuerpo está en el suelo
Me
desmayé. Me desmoroné
Solo
veo mis manos y sus nudillos rotos
Los
golpes en la pared me hicieron fuerte
Me
hicieron imbécil,
Pero
logro escuchar los pájaros
Logro
sentir el amanecer
Mi
estómago ya ruge, parece que todo está tranquilo
No
fue esta noche…
Está
noche no morí
Solo
fue un condenado letargo.
domingo, 2 de febrero de 2014
Mis noches.
La noche cae en su profundidad
Logrando ver en medio de la calle
Mi pobre gato, bandido...
Buscando sobras de huesos podridos
En el basural de la esquina.
Echando agua al árbol de mandarinas
Que tengo en un rincón de mi porche,
Sitiendo el frío intenso de las once de la noche.
Cierro la puerta con tanto esmero
Para que ningún malandro logre irrumpir en mi hogar
Todo esto lo hago cada vez que mi rutina se termina.
Pero antes reviso mi conciencia,
Reviso que estés bien dentro de mi corazón
Reviso las palabras que dije durante el día
Reviso mi tranquilidad...
Apago una a una las luces de mi casa,
Tomando un vaso de agua con hielo
Caigo profundo en mi cama
Tu aroma se refugia entre mis almohadas
Cuando nos estas cerca de mi.
Y aunque la noches sean pesadas
Por la complejidad de sus pesadillas
Siempre amanezco...
Con tu cuerpo entrelazado con el mio.
Logrando ver en medio de la calle
Mi pobre gato, bandido...
Buscando sobras de huesos podridos
En el basural de la esquina.
Echando agua al árbol de mandarinas
Que tengo en un rincón de mi porche,
Sitiendo el frío intenso de las once de la noche.
Cierro la puerta con tanto esmero
Para que ningún malandro logre irrumpir en mi hogar
Todo esto lo hago cada vez que mi rutina se termina.
Pero antes reviso mi conciencia,
Reviso que estés bien dentro de mi corazón
Reviso las palabras que dije durante el día
Reviso mi tranquilidad...
Apago una a una las luces de mi casa,
Tomando un vaso de agua con hielo
Caigo profundo en mi cama
Tu aroma se refugia entre mis almohadas
Cuando nos estas cerca de mi.
Y aunque la noches sean pesadas
Por la complejidad de sus pesadillas
Siempre amanezco...
Con tu cuerpo entrelazado con el mio.
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