Aunque
mi vista siempre falle de lejos, nunca logro perderte de ella
es
un estímulo constate, es un estímulo que no falla.
Estimulas
cada poro de mi piel y mis pupilas se dilatan el doble,
pienso
que si tal vez habláramos, no entendería ni una palabra
te
agarraría muy fuerte, tan fuerte
que
mis manos serán
las raíces incrustadas de tu cuello
para
estar frente a frente y saborearte,
para
morderte muy fuerte esos labios,
disfrutarlos poco a poco
y
morderlos hasta sangrar
o bueno quizás no llegaré tan lejos
pero
también sé que nunca llegaré a eso.
Desesperado
en la soledad pero no solo,
desesperado por elección propia
y
porque el momento para tenerte no es el indicado…
No
estoy siendo tan perdedor al afirmar todo esto
es
la crueldad de la realidad influenciada por ti.
Desesperado
en mis mañanas sin poder verte
y si
solo de reojo te veo sonreír,
mi día está hecho…
Puede
ser que mi locura temprana
por
esta fascinación casi obsesión por ti
esté
en un clímax que ni yo mismo logro entender,
sé
que todas estas palabras
se perderán de tu vista al
no saber leer.
Milímetro
a milímetro
tu cuerpo será mi mapamundi,
quisiera
descubrir los secretos de tus cicatrices,
descubrir
las historias que forjaron tus tatuajes,
unir
tus lunares
y besar cada parte de tu piel
que el sol no haya quemado
siempre
susurrándote al oído algo
y así subir el celo.