lunes, 11 de septiembre de 2023

Nada es suficiente.

Las pequeñas gotas de lluvia en septiembre
alborotan el bochorno,
las pequeñas gotas de lluvia en septiembre
mojan las calles oscuras
para reflejar las luces de las estrellas
porque a las nueve de la noche 
los gobernantes nos dejan a oscuras
porque les provoca.


Este bochorno es parecido
al bochornoso reflejo de mi rostro,
delante del espejo que no miente
con
la caliente amargura de estar inconforme...
Tengo un ojo más grande que el otro,
y mis brazos siguen escuálidos y débiles,
quiero abrazarte muy, muy fuerte
pero
nada es suficiente
y vamos perdiendo
pues mi papel del perdedor
es un protagonista 
el cual no merece ninguna de tus sonrisas
porque irónico es
que nunca pero nunca escriba sobre el amor
cuando tú ya has vivido dos.


Procederé a dormir
porque en la oscuridad
de mis calles,
los maleantes andan muy rimbombantes,
y quiero abrir la ventana
para que la brisa calme
y me quite los calambres,
pero la chispa de pensamientos futuros,
pesan delante de mí
para recordar con dejadez
que nada es suficiente
aunque yo aporte a nobleza
y me invites a estar presente.