Hola.
Estoy
desgastando los sonidos a mi alrededor,
hay
susurros entre los árboles de mi montaña,
siento
que el viento me habla…
Y ya
descubrí mi apatía,
y ya
descubrí mi desgano,
y ya
descubrí mis fallas.
No
tengo vigilados tus pasos,
sé
que no mientes, pero no me vas a contar
tus
verdaderas intensiones porque no me entiendes,
no he
contado a nadie de cómo es tu sombra,
estás
en mi completa disposición
porque
manejo el apego a mi ilusión,
soy
terco, lo sé, voy hacia delante también.
Ya no
puedo escribir pensando en ti
y que
no broten lágrimas
y que
no hay tristeza,
nunca
te idealizo
solo
quiero tener a mi lado, junto a mí
y
esa
es mi desesperación porque llego tarde
y
no
quiero llegar tan tarde,
no
quiero que tus labios me rechacen
porque
tienes mejores bocas que besar,
quieres
lujuria desenfrenada,
saciar
cada fetiche viejo y nuevo…
Mientras
tanto yo me desgasto en tantos pensamientos
que
cuando sueño,
ahí
es donde siento que te toco
y
me
quedan los rezos
y
abogar por la ayuda del universo
para
que nuestras manos de toquen en un día
pero
me siguen quedando muchas palabras para ti…
Porque
el primer saludo vino de aquí.